Quote by Rick Perry

The God we serve does not seek out the perfect, but instead uses our imperfections and our shortcomings for his greater good. I am humbled by my own limitations. But where I am weak, He is strong.


The God we serve does not seek out the perfect, but instead

Summary

This quote suggests that the deity being referred to does not focus on finding flawless individuals, but rather embraces and utilizes their imperfections and weaknesses for a larger purpose. The speaker expresses humility in recognizing their own limitations, but also recognizes that in their vulnerability, the power of their higher power shines through. It implies a belief in the ability of divinity to transform weaknesses into strengths and highlights the idea that individuals do not need to be perfect to serve a higher purpose.

Topics

God
By Rick Perry
Liked the quote? Share it with your friends.

Random Quotations

Para el obispo, la vista de la guillotina fue un golpe terrible del cual tardó mucho tiempo en reponerse. En efecto: el patíbulo, cuando está ante nuestros ojos levantado, derecho, tiene algo que alucina. Se puede sentir cierta indiferencia hacia la pena de muerte, no pronunciarse ni en pro ni en contra, no decir ni sí ni que no mientras no se ha visto una guillotina; pero si se llega a ver una, la sacudida es violenta; es menester decidirse y tomar partido en pro o en contra de ella. Los unos admiran, como De Maistre; los otros execran, como Beccaria. La guillotina es la concreción de la ley: se llama 'vindicta'; no es indiferente ni os permite que lo seáis tampoco. Quien llega a verla se estremece con el más misterioso de los estremecimientos. Todas las cuestiones sociales alzan sus interrogantes en torno de aquella cuchilla. El cadalso es una visión: no es un tablado ni una máquina, ni un mecanismo frío de madera, de hierro y de cuerdas. Parece que es una especie de ser que tiene no sé qué sombría iniciativa. Se diría que aquellos andamios ven, que aquella madera, aquel hierro y aquellas cuerdas tienen voluntad. En la horrible meditación en que aquella vista sume al alma, el patíbulo aparece terrible y como teniendo conciencia de lo que hace. El patíbulo es el cómplice del verdugo; devora, come carne, bebe sangre. Es una especie de monstruo fabricado por el juez y por el carpintero; un espectro que parece vivir una especie de vida espantosa, hecha con todas las muertes que ha dado.

Victor Hugo